Uso y Mantenimiento

Los proyectores halógenos de luz deben colocarse de diferente forma dependiendo de la zona que se va a iluminar y el uso que se le va a dar a dicha zona.

Los principales campos de aplicación de la iluminación con proyectores halógenos son: 

Los proyectores halógenos TECNOCEM están fabricados cumpliendo la normativa vigente de la CEE.

1 - Iluminación de áreas de trabajo o industriales

Las áreas de trabajo o industriales son grandes zonas situadas al aire libre, como zonas en construcción, aparcamientos, muelles de carga, puertos, parking, etc... Los proyectores de trabajo halógenos se suelen instalar agrupados en postes altos separados entre sí de 1' 5 a 3 metros, facilitando así los movimientos en la zona de trabajo. 

De esta manera, también se consigue disminuir el problema del deslumbramiento al quedar las luminarias fuera del ángulo de visión. En estas instalaciones se suelen usar lámparas de sodio a alta presión y las de halogenuros metálicos.

Focos halógenos iluminando correctamente una zona de construcción.

 

2 - Iluminación de edificios y monumentos

Aunque los edificios han sido diseñados para verse de día con la luz solar, se pueden conseguir de noche y con una iluminación adecuada interesantes efectos que atraigan la atención de los transeúntes sobre los mismos. Es cuestión de aplicar imaginación, creatividad, estética y técnica a cada caso particular.

A la hora de iluminar edificios con focos halógenos hay que distinguir dos casos:

En primer lugar los edificios funcionales, con fachadas simples sin elementos decorativos destacables, como los típicos edificios de fachadas de cristal, donde se aplica una iluminación uniforme, de aspecto plano y sin relieve. Tienen la ventaja de que se necesitan pocos puntos de luz aunque la situación de los proyectores halógenos, lejos del edificio, puede ser un inconveniente.

Iluminación con proyectores halógenos de un edificio funcional.

En segundo lugar tenemos los edificios con elementos arquitectónicos destacables como cornisas, frisos, relieves, etc... que necesitan un tratamiento especial, una iluminación no uniforme, que realce estos elementos y cree una impresión de relieve mediante juegos de luces y sombras, contrastes de color y/o brillo, etc. Para ello, se usan proyectores de trabajo colocados estratégicamente en la fachada procurando minimizar los daños en la misma.

Unos consejos útiles antes de empezar son estudiar las direcciones y distancia de observación que servirán para determinar dónde colocar los proyectores halógenos. Analizar la luminancia ambiental teniendo en cuenta que mientras mayor sea esta, mayor será la luminancia necesaria para que el edificio destaque. Ver qué obstáculos hay presentes en la dirección de observación como árboles, vallas, setos, etc.; en estos casos es recomendable poner los focos de luz entre el edificio y los obstáculos para que sólo se vean sus siluetas. Aumentar la luminancia de la parte alta del edificio para aumentar su altura aparente, eliminar sombras no deseadas con proyectores situados sobre la fachada o aumentando la distancia de estos a la fachada, aprovechar el efecto de espejo sobre el agua, etc. 

Proyectores halógenos iluminando un edificio con elementos arquitectónicos destacables.

 

Los niveles de luminancia dependen de las características de los materiales empleados (reflectancia, textura y color)  y de la luminancia de los alrededores. A modo de ejemplo podemos citar que la iluminación que necesita la piedra calcárea es de 40-320 lux, el granito de 50-500 lux o el ladrillo de 30-500 lux. Como podemos ver, son intervalos muy amplios cuyos valores dependen de cada caso particular.

Las lámparas a utilizar son muy variadas y dependen de los efectos que queramos conseguir. Lo más normal es emplear lámparas de mercurio a alta presión, halogenuros metálicos (cuando se requiera una buena reproducción del color) o vapor de sodio (materiales pétreos de tonos cálidos).

Otra forma de iluminar un edificio con proyectores halógenos colocados en diferentes lugares.

 

3 - Aplicaciones en alumbrado viario

En este campo los proyectores halógenos se reservan para la iluminación de nudos de comunicaciones, plazas, parking y en general de cualquier otra situación donde la instalación de luminarias tradicionales suponga complicaciones para la orientación, dificultades técnicas, etc. Presentan la ventaja de que simplifican la instalación al haber menos puntos de luz y producen una iluminación más uniforme y agradable.

Focos halógenos alumbrando una calle con una iluminación uniforme y agradable.

 

4 - Iluminación de instalaciones deportivas 

El objetivo de iluminar con proyectores halógenos las instalaciones deportivas ya sean interiores o exteriores es ofrecer un ambiente adecuado para la práctica y disfrute de actividades deportivas por parte de jugadores y público. Lógicamente, las exigencias variarán según el tipo de instalación (recreo, entrenamiento o competición) y el nivel de actividad (amateur, profesional o retransmisión por televisión).

Iluminar este tipo de instalaciones no es fácil, pues hay que asegurarse de que los jugadores y demás objetos en movimiento sean perfectamente visibles independientemente de su tamaño, posición en el campo, velocidad y trayectoria. Por ello es importante tanto el valor de la iluminancia horizontal como la vertical, aunque en la práctica esta última sólo se tiene en cuenta en las retransmisiones televisivas donde es necesario un buen modelado que destaque las formas de los cuerpos.

Lámparas halógenas alumbrando el pabellón polideportivo de acuerdo a sus necesidades deportivas.

Para evitar problemas de deslumbramiento que dificulten el normal desarrollo del juego, especialmente en deportes donde hay que mirar hacia arriba, conviene tomar medidas como instalar luminarias apantalladas, reducir el número de puntos de luz agrupando los proyectores halógenos o evitar colocarlos perpendicularmente a la línea de visión principal. Es conveniente montar las fuentes de luz a una altura adecuada; para el caso de instalaciones exteriores y visto desde el centro del campo, el ángulo formado por el plano horizontal y el eje de cualquier proyector halógeno de la batería debe ser superior a 25º.

Las lámparas a utilizar dependerán de la finalidad de la instalación. En instalaciones de competición, se usan lámparas de halogenuros metálicos por sus altas prestaciones. Pero en otros casos puede bastar con lámparas halógenas o de mercurio y sodio a alta presión; más baratas.

Iluminación halógena correcta para no molestar a los clientes de un gimnasio.

 

Las luminarias, en instalaciones exteriores, se disponen normalmente en torres colocadas en los laterales, en las esquinas del campo o en una combinación de ambas. En el primer caso se emplean proyectores rectangulares cuya proyección sobre el terreno tiene forma trapezoidal  obteniendo como valor añadido un buen modelado de los cuerpos. En el segundo caso se emplean los circulares que dan una proyección en forma elíptica.